
Comentario 26 de febrero 2024 La balanza de pagos de América Latina se ubicaría entre -2.8 y -3% del PIB en los años 2023 y 2024. Un crecimiento de bajo aliento que reduciría las importaciones, una importante volatilidad de los precios de las materias primas exportables, una demanda que no despega en China y los países desarrollados dificultaría los flujos de comercio. De manera estructural la canasta de bienes transables (salvo el caso mexicano) se ha mantenido muy poco diversificada, y algunas economías de la región aún son consideradas cerradas en su política comercial. La economista de los Estados Unidos, Shannon K. O’Neil ha venido escribiendo desde hace décadas que una región como América Latina tiene comercio escaso. Por el contrario, la gran mayoría de países se mantiene en una situación de poco comercio propio de los años setentas. De acuerdo con distintas mediciones mientras el promedio de los países del mundo tiene un cociente exportaciones + importaciones del 53% del PIB, muchos los países de América Latina tienen un indicador similar del orden de 11 a 12 puntos porcentuales por debajo de ese número.