
En su mas reciente trabajo sobre perspectivas económicas la OCDE ha manifestado su preocupación por una reducción de la productividad. Desde la crisis del Euro (2012-2013) la inversión (FBKF) ha venido disminuyendo en diversos sectores y se detectan menos empresas innovando y explorando nuevos caminos de la producción y los servicios. La creación de nuevas empresas ha caído en 2% en el último lustro, mientras que los empleos creados por firmas jóvenes caen en 6%. Distintos trabajos y diagnósticos muestran que los empresarios tienen dificultades para encontrar trabajadores calificados y ello repercute en las ofertas laborales y los salarios. La OCDE hace una evaluación sobre el impacto que la regulación económica tiene sobre los negocios, al imponer nuevos procesos de cumplimiento de requisitos, nuevos reportes y posibles estándares mínimos de producción. Esto podría imponer una elevación de los costos fijos de producción, así como, un desincentivo a la innovación y formación de nuevas empresas.







